miércoles, 19 de enero de 2011

Que no pare el tren y que siga sonando la trompeta




















Que no pare el tren y que siga sonando la trompeta



      Hoy me levante y al revisar el internet me encuentro con una noticia bien desagradable y lamentable que sigue poniendo en evidencia la ineptitud del sistema judicial venezolano. Se trata de la muerte a manos del Cicpc de Trompeta, un hombre que transformó la historia de los penales en Venezuela, un tipo serio que decidió dentro de la prisión enmendar el error que cometió obligado por el sistema injusto en que vivimos, un pana que dentro de la cárcel le dio la mano y orientó a los más jóvenes para que resistieran y no se convirtieran en los muertos vivientes en  que quería convertirlos el sistema, un hombre que creo dentro de los penales una comunidad con cooperativas, restaurantes, equipos deportivos, agricultura, artesanía y muchas cosas de las que disfrutan los seres humanos de afuera tan humanos como los reclusos. En síntesis un Héroe y Libertador anónimo dentro de su comunidad, que por medio de la autogestión y sin recibir un centavo de nadie más que de los mismos presos; incentivó a la transformación del infierno en campos fértiles de solidaridad, hermandad, creatividad y sabiduría. El tipo le hizo la chamba al estado, chamba que el estado jamás hará porque simplemente como yo y como muchos ciudadanos no saben cuales son las carencias y necesidades de un preso, por la sencilla razón que no las vivimos en carne propia. Pero Trompeta ya les dio cátedra de como se humaniza un penal para que aprendan, lástima que la muestra de agradecimiento haya sido una ráfaga de plomo a su persona.


          Los medios de comunicación como siempre relatan su versión holliwoodense del suceso, donde hay buenos (Policías) y malos (ex convicto y pobre), donde hay persecusiones, policías indefensos heridos y delincuentes malvivientes armados hasta los dientes pero muertos (que ilogico no?); y al mejor estilo de la serie gringa C.O.P.S le meten su picantico "...el hombre los atacó con un fusil 7,62..." y "...se le incautaron 9 panelas de marihuana..." Y siguen estigmatizando y criminalizando la pobreza, pues de muy buena fuente y una fuente muy pero muy seria me llegó la información que tal fusíl y panelas de marihuana llegarían mas tarde a el lugar del suceso, donde lo único que se encontró fue el cadáver de un joven luchador e idealista que había salido a gozar de su libertad unos pocos días atrás después de haber pagado cana durante 14 años donde los últimos años de su condena le dio cátedra a Raquel y todo aquel sobre humanidad, convivencia y solidaridad. 


         Y si es que quedan tipos serios dentro de nuestro podrido y purulento sistema judicial, es prudente hacer una investigación profunda y exahustiva de la muerte de trompeta. Y reconocer públicamente la labor incondicional del camarada luchador Humberto José Rodriguez Griman para sus convives Trompeta. Tomar ejemplo de su labor y darle a los penales la tajadita de petróleo que les corresponde, pero no cometer la burrada de darselo a los directores para que escalen posiciones sociales , eso sería un retroceso inminente a la cuarta, hay que administrar esos reales de manera endógena en conjunto con los mismos presos, escucharlos a ellos e invertir en lo que ellos necesitan.




       "Matan a la gente pero no matan a la idea" (como dice aquel sabio salsero intelectual y sifrino); no mataron a trompeta mataron a la imagen equivocada que tiene el sistema de los pobres, mataron a la imagen criminalizada de la pobreza que ha creado el estado y los malditos medios de comunicación. Trompeta esta vivo dentro de la Pgv donde impulsó una valiosa lucha por la reivindicación y los derechos humanos de los presos, trompeta sigue vivo al lado de sus convives y su familia. No lo mataron le dieron alas para que continuara su chamba vigilante desde alla arriba, bien recibido por la corte calé, mandandonos acordes endógenos junto a Miles davis, improvisando con ardilla: ...¡¡¡tengo que alejarme de las fieras...¡¡¡ haciendole el coro a Vladimir Quintero y cantando ..."Ya se los dije no como lo que es nada...".


Que no se pare el tren y que siga sonando esa trompeta.